La fe es un elemento clave de la religión. Consiste en creer en algo sin necesidad de tener pruebas a su favor, y aun teniendo pruebas en contra. Por lo tanto la fe es un mecanismo que bloquea el pensamiento racional.
La Iglesia ha conseguido imbuir en la mente de las personas la demencial idea de que la fe es una virtud y que cuanta más fe se tenga, es decir, cuanto más en contra de la razón se vaya, más virtuoso se es.